Ermita del monte Aloia, Tui, Pontevedra |
Leemos un
cuento de miedo, del libro Jardín umbrío, como muestra de la
literatura modernista. La historia sucede en la capilla de un pazo
gallego. En la tumba de un caballero se escucha un crujir de huesos
que pone los pelos de punta al protagonista del relato. Este es un
joven cadete del Regimiento del Rey, quien por supuesto no quiere quedar como un cobarde ante su madre, hermanas y un religioso allí presentes. Se acerca al sarcófago para indagar la
causa del ruido, tira de las anillas de bronce de la losa y... ¡oh,
horror!, la calavera y el esqueleto se agitan en su desapacible
lecho... El Granadero del Rey coge tembloroso la calavera entre las
manos y advierte que hay un nido de culebras alojado en su interior.
No es cosa de trasgos, pero al atemorizado cadete le cuesta superar
su primera prueba de fuego.
Estamos en
un instituto de un pueblo antiguo de Galicia. Es invierno. Hace días
que llueve sin cesar. En la catedral hay numerosos sepulcros tallados
en piedra... ¿Y si trasladáramos la clase a la penumbra del templo
gótico?
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