Cuaderno de invierno, 9 (o la Muerte en camión)



Por más que el autodenominado Estado Islámico golpee y los autodenominados guardianes de la civilización occidental proclamen la guerra de los mundos, perseveremos en las buenas costumbres de nuestro pueblo llenando las plazas y terrazas de los bares, charlatanes, bulliciosos y enmendadores de todo lo humano y lo divino; de modo que si la Muerte viene a llevarnos por delante en un camión de 20 toneladas, nos pille con la cerveza y la tapa de jamón puestas... quizá echando pestes del gobierno, quizá blasfemando (ya lo dijo Mairena: desconfiad de un pueblo donde no se blasfema).

Comentarios